domingo, 1 de febrero de 2009

EL APRENDIZAJE Y EL DESARROLLO DE COMPETENCIAS

El proceso de aprendizaje implica una serie de factores que se articulan entre si y que desembocan en el desarrollo de competencias en el individuo. Las diferentes teorías del aprendizaje nos muestran que el aprender no es algo que tan fácilmente se pueda observar o medir con base en algo generalizado es algo personal pero al mismo tiempo es social, porque el aprender se construye a través de la sensaciones o percepciones personales que hacen que se le de un significado a aquello que se aprende y más si el tema o contenido tiene un interés y causa motivación en el individuo. Pero también es cierto que el aprender implica en relacionar la información en la realidad en la que vivimos para poder asociar con los conocimientos previos, interpretarlos y reconstruirlos con base en la experiencia de lo ya obtenido y de esta manera tener el conocimiento como una herramienta para resolver resolver problemas.
Aprender no es algo trivial como para poder enforcarnos sencillamente en transmitir teniendo como referencia los contenidos de un programa, implica atender todos los indicadores personales y sociales que favorecen el “aprehender” y el desarrollar las competencias que demuestren las capacidades, actitudes y valores necesarios para saber, saber ser, saber hacer y saber estar en la vida personal y profesional.

CONCEPCIONES DEL APRENDIZAJE

La adquisición de conocimientos que nos llevan a poseer un aprendizaje, tiene diferentes posturas que nos explican cómo es percibida, asimilada, recibida la información, podemos relacionarlas con un enfoque de competencias. Dentro de la teoría del procesamiento de la información nos damos cuenta que para demostrar las capacidades desarrolladas tenemos que recuperación la información percibida, reconocida y codificada en su momento para ser transferida a situaciones que nos exijan la resolución de problemas, como también es el caso de la teoría del aprendizaje por descubrimiento, que nos dice que para aprender se necesita partir de una realidad, de una situación relevante para poder asimilar lo abstracto.
El constructivismo nos da cuenta de que el poseer conocimientos previos e interactuar en actividades que atraigan la atención nos lleva a reequilibrar la información, a transformar los conocimientos y que nos permitan experimentar y resolver problemas y así demostrar habilidades y capacidades que manifiesten las competencias de un individuo de una manera activa, al igual que la teoría cognoscitiva que nos dice que el individuo para captar la información debe estar motivado para comprender y así retener la información que posteriormente va a utilizar en un contexto determinado, mismo que al interactuar con otros hace que se dé cuenta que la información tiene una interpretación individual, porque el significado es distinto para cada ser humano porque la experiencia previa es distinta como nos dice la teoría social constructivista.
El aprendizaje se construye en la interacción social, sin en cambio es personal al interpretarse según los conocimientos, experiencias e información previa que se posee, existen medios y herramientas que hacen cada individuo se apropie de la información que adquiere un significado y por lo tanto, sea aplicable en los diferentes ámbitos para resolver problemas y tomar decisiones personales y profesionales.